27 agosto 2009

Don't know why, even know WHAT

Bueno, sé que la entrada anterior es un poquín larga, y que en comparación esta será muy breve, de hecho yo quería seguir agragando pedazos de letras... pero se iban a hacer eternas, y eso simplemente no tendría sentido. Además, ya pasaron uno o dos días desde aquellos sucesos, así que bueno... supongo que sabrán que no me gusta NO capatar cada detalle y emoción, y que en mí varían muuuuuy (extremadamente) rápido esto de los sentimientos, así que no creí que fuera lo mejor seguir y seguir alargando esta historia... de todos modos cuando decidí parar recordé otras cosas que pasaron, y otras conversaciones que tuve, pero... se quedaron ahí, en mi memoria con el orgullo de simplemente haber sido recordadas...

25 agosto 2009

Don't be so mean life.

Me torturaba la deseperanza. Estaba tan angustiada y frustrada que no sentía ni pizca de dolor, los olores eran insípidos, y aún más los colores. Y lo peor era estar así por nada. Estaba así por sentir la falta de palabras con que me tenía él, simplemente nunca me había pasado, y me hacía un mal más grande de lo que se podía ver. Era una fuerza invisible que me arrastraba al fondo de mi misma... ¿cómo había caído hasta este extremo? La balanza se había roto hace mucho, pero yo trataba de repararla a escondidas con pegamento. Eso estaba mal, era tal como no me lo imaginaba.
Esa mañana había leído antes de vestirse lo que tenía peagado en la pared.
"...Creo que hay un momento en la vida en que todos nos damos cuenta que algo anda mal..."
'Qué raro que nunca me haya pasado', pensé. No fuí más allá de esas palabras y me voltee.
_____________________________________________________________

Mi salud no tenía nada malo. Yo lo sabía, estaba segura, pero aún así estaba recostada en una camilla solitaria en la enfermería. ¿Qué me había pasado?, parecía un zombie, cómo en los libros cuando la protagonista rompe con el amor de su vida, y ni siquiera lo había notado.
La manta amarilla que me cubría emitía un calor sobrehumano, y de repente me precía tan... acogedor, tan bueno y necesario. Me acurruqué complacida, y casi sonreí. Hace mucho que tenía sueño y estaba cansada, así que no tardé mucho en quedarme dormida...

Era el mismo día, o al menos eso parecía por el tiempo. Soleado, cielo azul, brisa agradable... estaba enferma, pero no estaba sola. El me abrazaba por la espalda, estaba ahí cuidándome cómo tantas veces dijo desear hacer cuando yo estaba mal. Me acurruqué y agarré una de las manos que me rodeaba. De repente, él pegó su cara a mi cuello.
-¿Qué haces?- pregunté en voz baja, media divertida, media feliz y sorprendida.
-Huelo- contestó besando mi piel.
-¿A mí?-dije riendo.
-Sí... mmm, tu pelo huele a... flores y a pera.
-¿Flores y... pera?- solté su mano y me dí vuelta hacia él. El me abrzo fuerte, pero al mismo tiempo delicadamente y con una ternura palpable.
-Sí, a eso huele tu pelo- dijo acercándome más a su pecho. Luego calló-Y hay algo en tí que huele a vainilla... ¿estoy loco?
Reí.
-No, no estás loco. Son mis labios- besé suavemente bajo su nariz. El cerró los ojos. Luego ambos volvimos a cerrar los ojos, y nos perdimos...


De repente, un ruido me despertó. Wow, qué sueño. Perecía tan real... los olores, cada color y cada luz de mi visión, era todo ahora tan irreal y lejano. El día seguía siendo el mismo, y lo comprobé cuando después de un par de minutos abrí los ojos.

-Creo que me voy a ir... me quedé dormida- dije a la enfermera
-Ah, sí... te fui a ver y estabas durmiendo como un tronquito- hice una mueca de sonrisa- bueno, que estés bien.
-Gracias...

¿Estaba segura que era el mismo día?, porque me parecía todo diferente, parecía una nueva vida, como si hubiera dormido siglos y siglos, hasta llegar al mismo punto en donde había cerrado mis ojos. Era algo cíclico, algo que ahora no parecía tan imposible. Mientras caminaba por el luminoso corredor recordé mi sueño, pero no me importó. No estaba feliz, pero estaba renovada.
_____________________________________________________________

Qué rápido acababan los inicios. Algo sólo era nuevo por un rato, máximo un día, al igual que la gente.
Encendí el computador. Estaba en pijama y había estado viendo tele y comiendo jamón hasta hace un rato. Sentía que merecía esa pausa en mi vida, y no me dio culpa alguna disfrutarlo, no estudié, no ordené mi pieza, no hica nada para el colegio, no hice nada que no fuera por mi. Pero poco después, un sentimiento desagradable se apoderó de mi. El vacío cada vez crecía más y más, y cada canción parceía hablarme directamente. Cada canción me susurraba cosas y me gritaba otras.

We'll do it all Everything On our own
We don't need Anything Or anyone
If I lay here If I just lay here Would you lie with me and just forget the world?
I don't quite know How to say How I feel
Those three words Are said too much They're not enough
(...)
Forget what we're told Before we get too old Show me a garden that's bursting into life...


El lo había hecho por mejor, lo sé. Había tratado de hacer que me desahogara, pero lo único que logró fue que pensara aún más en todo, que quedara peor de lo que estaba.
No quería hablar con nadie, no quería explicar nada ni exponer mis sentimientos y emociones. Sólo quería calma, y decirle a UNA persona 'estoy mal, no puedo mentir'.

Dear friends of this, I cannot be..
Oh, Romeo is bleeding to death..
'Til, secretly, to death, Not more than some kind of metaphor That I can't see..
So I'll drink until I see it.
I can't see, so I'll drink until I'll see it.
This sky will make me sick, So I'll give up on you, I'll give up on this.
This sky will make me sick, So I'll give up on this,I'll give up on you...


Lo hice. Hablé.

-¿Puedo decirte algo?
-Sí, habla...
-Pero por favor no hagas preguntas...- dije casi suplicando- No estoy bien. Me siento horrible, como una cosa pisoteada y hecha añicos.

...It’s no surprise I won’t be here tomorrow
I can’t believe that I stayed till today
There’s nothing here in this heart left to borrow
There’s nothing here in this soul left to say
Don’t be surprised when we hate this tomorrow
God know we tried to find an easier way
Yeah you and I will be a tough act to follow
But I know in time we’ll find this was no surprise...


-¿Por qué, qué te pasó?

Ahí estaba. Sé que la gente lo hace por mejor, y que es díficil creerle a alguien que está muy mal ese tipo de cosas, pero hubiera deseado simplemente que esta vez me creyeran... que dejara todo como estaba y simplemente, no sé... pusiera cara triste, o me dijera "te quiero", "sabes que cualquier cosa siempre estaré ahí". Sólo para saber que le importo de hecho a alguien, no es porque en realidad sirva de algo, es sólo para no rodearse de tanta frialdad.

Wont be so easy This time to hurt me, You can try
This time baby there are no tears left here to dry
If you think you can ruin me like before, If you think you can do that anymore
Wont get to far no, You can't break a broken heart

So try your best now baby Try your best to break me
You can't break a broken heart
No damage you can do now I'm immune to you now
You can't break what broke apart
There's nothing you can do to me no more
You can't break a broken heart...


No sé si afortunada o desafortunadamente tuve que irme. Apagué el computador, pero al cerrar todo olvidé despedirme, y cuando me dí cuanta era demasiado tarde...

...Well, every moment spent with you
Is a moment I treasure
I don't wanna close my eyes
I don't wanna fall asleep
'Cause I'd miss you, baby
And I don't wanna miss a thing
'Cause even when I dream of you
The sweetest dream would never do
I'd still miss you, baby
And I don't wanna miss a thing
Lying close to you
Feeling your heart beating
And I'm wondering what you're dreaming
Wondering if it's me you're seeing...


Después de un rato, mi celular saltó anunciando que tenía un nuevo mensaje.

"¡Te fuiste! Me dejaste muy preocupada, no me dijiste nada... pero bueno, pucha, tú sabes que te quiero mucho y que cualquier cosa voy a estar ahí para tí..."

Releí el mansaje y me quedé quieta. ¿Se suponía que contestara ese mensaje?, ¿qué pasa si no lo hacía?... luego me despabilé, y comenzé a escribir...

I don't need to be anything other than a prison guard's son
I don't need to be anything other than a specialist's son
I don't have to be anyone other than a birth of two souls in one
Part of where I'm going is knowing where I'm coming from

I don't wanna be anything other than what I've been trying to be lately
All I have to do is think in me and I have peace of mind
I'm tired of looking 'round rooms wondering what I gotta do
Or who I'm supposed to be
I don't wanna be anything other than me

I'm surrounded by liars everywhere I turn
I'm surrounded by imposters everywhere I turn
I'm surrounded by a deadly crisis everywhere I turn
Am I the only one to notice?
I can't be the only one who's learned

I don't wanna to be anything other than what I've been trying to be lately
All I have to do is think in me and I have peace of mind
I'm tired of looking 'round rooms wondering what I gotta do
Or who I'm supposed to be
I don't wanna be anything other than me

Can I have everyone's attention please
See, not like this and that
You're gonna have to leave
I came from the mountain, the crust of creation
My whole situation made from clay, dust, stone
And now I'm telling everybody

I don't wanna be anything other than what I've been trying to be lately
All I have to do is think in me and I have peace of mind
I'm tired of looking 'round rooms wondering what I got do
Or who I'm supposed to be
I don't wanna be anything other than me
I don't wanna be...
I don't wanna be...
I don't wanna be...
I don't wanna be...

21 agosto 2009

Algo más que un vestido de flores

Bueno, la entrada anterior es un cuento... aclaro que YO NO LO ESCRIBI. Lo puse porque adoré cómo estaba escrito, y porque el mensaje de la autora simplemente me tocó. Su postscript me hizo pensar un buen rato, ya que la verdad no había interpretado su relato de ese modo... pero cuando leí lo que había tras todas aquellas palabras, me pareció muy lógico. Galletita para quién descubre el mensaje.

La niña del vestido de flores

A veces, creemos que algunas de las cosas más sorprendentes de la vida son producto de la imaginación o son sueños. Yo podría decir que no. Porque lo que viví aquel día fue algo que no conseguiré borrar de mi mente jamás. Y sé que no se trataba de un simple sueño.
_____________________________________________________________

El cielo estaba nublado la mañana que mi madre me trajo al hospital. Hacía tres días me había despertado en mitad de la noche, gritando de dolor, pero mi madre no sabía qué podía ser.

El médico le había dicho que era algo relacionado con n posible trastorno del sueño o algo así, por lo que tenía que pasar una noche en el hospital.

-Espera aquí, Javi.

Mi madre me dejó esperando en uno de los bancos, mientras ella iba a hablar con la recepcionista. La sala era blanca y luminosa, tal y como siempre había imaginado que sería un hospital. Era la primera vez en toda mi vida que visitaba un lugar así, y me encontraba muy nervioso.

Un par de ancianos estaban sentados al otro extremo de la sala y algunas enfermeras corrían de acá para allá. A veces, se paraban a hablar con los ancianos y estos les dedicaban un par de palabras cordiales, pero enseguida volvían a sumirse en un estado parecido al sueño.

Hasta que no volví a pensar en mi madre no me di cuenta que ella había desaparecido. Y yo no tenía la más mínima idea de cómo volver a casa.

De repente, el hospital se me antojó triste y silencioso. No se oía ni una mosca. Los ancianos estaban profundamente dormidos y la recepcionista también había desparecido. Me encontraba solo y perdido.

Comencé a llorar de desesperación, cubriendo mis ojos con los puños cerrados. Pero nadie parecía oírme.

De repente, mi llanto se detuvo de golpe al escuchar unos pasos que se acercaban. Levanté la vista.

Era una niña, una niña pequeña. De mi edad. Tenía los ojos grandes y redondos y llevaba puesto un vestido rosa de flores que estaba muy desgastado. En sus brazos descansaba un conejo blanco de peluche.

Me miraba fijamente, aunque su expresión no cambió ni un instante. No sonreía, pero tampoco estaba triste.

-¿También te has perdido?- le pregunté, secándome las lágrimas. Mi padre me había dicho que un hombre no debe llorar delante de una mujer.-¿No está tu madre contigo?

La niña no me contestó. Simplemente se acercó y se sentó a mi lado, sin mirarme. Sus ojos estaban posados en su conejo de peluche.

-¡Javi! ¡Javi!

Aparté la vista de la niña y la giré hacia donde provenía la voz. Mi madre estaba justo delante de mí, agitándome los hombros.

-¡Javi! ¿Me escuchas?- preguntaba con desesperación.

-Sí, mamá, claro.- le contesté, sorprendido por su reacción. Miré hacia los lados, y me di cuenta de que los ancianos estaban despiertos y de que las enfermeras seguían caminando de un lado a otro. Me extrañó.

-Vamos, Javi. La enfermera va a llevarte a tu habitación.- mi madre me dio la mano y yo la estreché.

-Perdona, es que me ha entretenido esa niña.- me disculpé mientras mi madre me llevaba por uno de los pasillos.

-¿Qué niña?- preguntó mi madre, mientras me miraba con sorpresa.- Allí sólo estaban las enfermeras y aquellos otros pacientes.

-¿Acaso no la viste, mamá?- pregunté, pero ella no me respondió. Habíamos llegado a una habitación en la que había una enfermera.

-¡Vaya, buenos días!- exclamó ella jovialmente. Mi madre sonrió.- Así que tú eres Javier, ¿no?

-Javi.- le corregí.

-De acuerdo, Javi.- la enfermera se rió.- Voy a llevarte a tu cuarto mientras tu mamá termina de hablar con el doctor, ¿de acuerdo?

La enfermera me tendió su mano y me llevó fuera de la sala, donde mi madre me despidió con la mano.

-Estas hecho todo un hombrecito.- me dijo ella mientras caminábamos por los pasillos.- ¿Cuántos años tienes?

-Voy a cumplir los nueve dentro de dos meses.- respondí, muy orgulloso.

-¡Vaya! Eso es ser muy mayor.- la enfermera se rió.- Entonces te voy a poner en el mismo cuarto que los niños mayores, ¿te parece bien?

Asentí, sonriendo. Me gustaba que la gente me tratara como alguien mayor.

-Aquí es.- dijo, mientras abría una puerta.

Esa habitación era más gris que la sala de espera, pero estaba mucho más iluminada. En ella había seis camas de sábanas amarillas, separadas por una cortina azul.

La misma niña que había visto en la sala de espera estaba sentada en una cama junto a la ventana.

-Lamento que tengas que quedarte solo, pero por ahora no hay ningún niño más.- me dijo la enfermera.- Acuéstate en la cama que quieras, enseguida vendrá el doctor.

-Pero si esa chica...- me giré para responderle, pero ya había cerrado la puerta.

La niña miraba por la ventana, aunque no parecía estar viendo nada en especial. Estaba tapada con la sábana amarilla hasta la cintura, y tenía el conejo de peluche en su regazo.

-Hola...- murmuré, dejando mi mochila encima de mi cama.- Esto, gracias por acompañarme antes.

La niña me miró con sus ojos redondos. No dijo nada.

-Me llamo Javi, ¿y tú?

El flequillo castaño le cayó sobre los ojos y alzó una mano para apartarlos. No dijo nada.

-¿Es que acaso eres muda o qué?- la niña negó levemente con la cabeza.- Entonces, ¿por qué no hablas?

La niña desvió sus ojos hacia la puerta. Me giré y en ese instante entró el doctor, seguido por mi madre.

-Eres Javi, ¿verdad?- me preguntó, mientras miraba los papeles de su carpeta.- Me han dicho que no duermes bien, ¿no?

-El otro día me desperté gritando.- contesté, mientras me sentaba en la cama que había al lado de la niña.

-Quítate la camiseta. ¿Te duele algo?

-No, no me duele nada. Sólo me desperté gritando.- el médico empezó a palparme el pecho y a preguntarme si me dolía donde me tocaba. Yo decía que no.

-Bueno...- murmuró cuando terminó de examinarme.- Vas a estar una noche aquí, durmiendo. Vamos a comprobar que no tienes nada, ¿vale? Para eso vamos a enchufarte a una máquina que nos lo va a decir.

Asentí mientras me sentaba en la cama. La misma enfermera de antes entró en la habitación y ayudó al médico a ponerme unos cables en el pecho y en la frente.

-Está frío...- murmuré, y el médico rió.

-Dentro de nada estará mejor.- contestó él.- Vas a estar aquí todo el día durmiendo. Vamos a dejarte despierto hasta la hora de comer, así que si quieres leer o algo, puedes hacerlo mientras no te levantes de la cama.

-Vale.

-Bueno, Javi, vendré a visitarte mañana.- dijo mi madre cuando se fueron el médico y la enfermera.- Ya sabes que tengo que trabajar.

-No te preocupes mamá, tengo compañía.- sonreí mientras señalaba a mi compañera, que volvía a mirar por la ventana.

Mi madre me miró sin comprender, y tras darme un beso, se marchó.

Cogí uno de los libros que había traído conmigo y lo abrí por la primera página.

-¿Te molesta que lea?- pregunté, pero la niña seguía mirando por la ventana y no dijo nada, así que empecé a leer.

La mañana pasó con tranquilidad mientras yo leía y ella miraba la ventana. Casi no notaba su presencia.

A las dos llegó una enfermera distinta con un carrito lleno de bandejas y puso una sobre mi regazo.

-Aprieta el interruptor que hay junto a tu almohada cuando quieras que venga a recogerlo.- me dijo antes de irse.

-¡Espera!- exclamé. La enfermera se giró. Señalé a la niña.- ¿No le das una a ella?

-Hijo...- respondió dulcemente la mujer.- En esa cama no hay nadie.

Miré sorprendido a la enfermera, que se marchó en silencio. Comí un poco de pan, lo justo para saciar el hambre.

-¿Quieres?- le pregunté a la niña, que se había girado para mirarme.- A ti no te ha dado ninguna bandeja.

Los grandes ojos de la niña se abrieron más de lo normal debido a la sorpresa. Se levantó lentamente de su cama, con el conejo en brazos, y se sentó en los pies de la mía.

-Come.- añadí, con una sonrisa.

La niña empezó a comer muy despacio, cortando el pan con los dedos. La observé masticar hasta que terminó con todo lo que había en la bandeja.

Se giró hacia mí y me sonrió. Entonces, me sentí desvanecer.
_____________________________________________________________

Los rayos del sol que me daban en la cara me despertaron. La niña seguía sentada en los pies de mi cama, y miraba con una sonrisa a las palomas que se habían posado en el alféizar de la ventana.

-Ya es de día.- murmuré, bostezando. Ella me miró y sonrió.- ¿Te has quedado aquí toda la noche?

Ella sólo siguió sonriendo y me tendió el conejo de peluche. Titubeando, lo cogí. Entonces, el médico entró en la habitación y me dijo que ya podía irme a casa.

Me agarró de la mano y me sacó de la habitación, alejándome de la niña del vestido de flores.

-No sabes la alegría que me has dado cuando me han dicho que ya podías irte.- dijo mi madre, una vez que habíamos salido del hospital.- Por cierto, ¿de dónde has sacado ese conejo?

-Ah.- exclamé, mirando al peluche.- Me lo ha dado la niña con el vestido de flores que había en mi habitación.

-Javi...- suspiró mi madre.- No había ninguna niña en tu habitación. Estabas solo. Seguramente te afectaron los sedantes, cariño. Pero no pasa nada, ya estás bien.

-Pero...- me interrumpí en mitad de la frase. ¿Había soñado, tal vez, que existía una niña enferma a la que nadie hacía caso? ¿Sólo había sido un sueño?

Alcé la vista al cielo, en dirección a las ventanas del primer piso del hospital.

Desde una de ellas, una niña de mi edad con los ojos grandes y redondos, y que llevaba un desgastado vestido de flores, se despedía de mí con la mano.

H.BB.

Just...life. Just say something.

Es que cada vez esto me sorprende más. Sí, cada vez descubro más similitudes de mi vida con... ¿las películas? Sí. Pero ya no es tanto por el drama, afortunadamente eso ya pasó bastante, pero sino, es por eso de "la vida te sorprende cuando menos lo imaginas"... es simplemente que me doy cuenta que todo me está pasando al revés de lo que pienso. "Me fue mal...", FALSO. "¡Oh, divertido!", qué desesperante. "Qué fastido esto..." Wow, divertido... Qué cosa más loca. Sólo espero que no sea siempre así, porque si bien suele ser divertido, no quiero pensar que las cosas buenas que pasen por mi cabeza vayan acaso a salir desastrosamente.
Ahora pasando a otra cosa, (sí, hoy quiero escribir casualmente, más "informal" y menos lírico pues... gracias) hablemos de la inmortalidad del cangrejo... Que va es mentira. No, ahora sí, hoy fue un día... "especial". Sí, qué rarezas más cómicas y tétricas, y no sé... fueron muchas cosas. '¡Viva, día del jeans!... Andrea... ¿estás con uniforme?' "Sí" ¡BRAVO! Alfajores por soportar un estrés del tamaño de un elefante embarazado, 0 claveles para doña B.S, risas casi fatales pre-funebres, fantasmas en el celular, Andrea cretiva; vendedora; inventa historias; vidente... ¿en sueños?, y un código en geometría "binario" que predecía vida-muerte muerte-vida. ¿Qué más pides de un día Viernes, en clases? ¡Claro! Karma acumulado para tecnología "maldito motor bipolar..." 'Eh, cuando me voy funciona', eso fue divertido para ser tan exagerado... Y claro, cómo se podría vivir un Viernes sin un... ¡bananamóvil! Sí, la verdad está muy lindo, es toda una obra de arte para ser un pedazo de desecho amarillo. Y bien, avanzando con el vehículo de mi pariente (¿mono?) pude descansar y ver un auspicio inspirador: un capítulo no tan triste (y buenísimo) de una de las pocas cosas que vale la pena ver en televisión. ¿Era un augurio o qué? Sí, espero. Luego de casi quedarme dormida de tanto relajo me llamaron por teléfono (pedazo de comediante Andrei) para invitarme a una actividad para mañana de la fundación... "El mejor amigo" Claro, mi mejor amiga vive en Calama... y mis otros mejores amigos... ¡claro, diabéticos también! Sí, ahora invitaré a una de mis tres únicas mejores amigas NO diabéticas. ¿Qué más esperas de un triste Viernes? Una rara y agradable conversación en familia para el almuerzo... a todo esto sólo hay algo que decir, ¿no?

WOW.




P.D.A: Ignoren esto si es lo que quieren. Son sólo locuras que no sabía cómo escribir. No los culpo si no entienden nada... al cabo, ¡ni yo entiendo lo que escribo! Y bien, la puntuación no está muy (para nada) buena... pero no lo voy a cambiar... le quitaría lo divertido.

20 agosto 2009

"B.S. sostiene"

"B.S. sostiene que se sorprendió. El colegio ese día fue bastante agradable, nada de molestias en su retorno y todo se le hizo bastante 'ligero'. Sostiene que la sorpresa le causó agrado, y cuando lo notó, pensó por un momento y se dijo 'vaya, fue un buen día después de toda la paranoia'. Como siempre, las sorpresas abundan. A B.S no le faltaron, y a pesar que durante el día y el principio de la tarde todas fueron gratas, la tarde y la oscuridad le trajo varios disgustos. B.S. sostiene que no fueron 'graves', pero igualmente sostiene que causaron un efecto quizá 'duradero' y 'profundo' en sí. Un amigo que creía muy centrado y considerado, dijo algo que le pareció algo 'desubicado', o más bien, desilucionante. Sostiene que creía que él no era así, y eso le caló un poco el día, pero siguió adelante. Luego su padre montó un show de lo más desagradable, lo que era más o menos costumbre, pero B.S. seguía sin soportarlo y le causaba una profunda molestia que pasara justo en ese instante, sin fundamentos ni argumentos existentes.
B.S. sostiene que el mundo es una caja de pandora, sostiene que cuando se lo propone, la vida deja de ser algo 'obvio'."

18 agosto 2009

"Y era verdad que mis sueños eran mentira"

Acabo de acordarme de esa frase... creo que la vi... sí, escrita en una zapatilla. Ya sé que parece que me volví un poquito más loca, pero no, de verdad que ví eso en una zapatilla... igual no viene al tema, no sé siquiera si eso me identifica hoy, pero por algún extraño y desconocido motivo se apuntó con laser esta frase.

Claro, dejando atrás el laser y las zapatillas... debo admitir que no tengo idea de qué escribo hoy. ¿Qué puedo contarle a mi querido público fantasma?, no sé... encontré muchas canciones nuevas que realmente tienen un efecto en mí. De hecho es música perfecta para el blog, para escribir y leer estas burdas y ridículas líneas. Así que estoy creando varios playlists... Sí.
Eh, hoy leí... algo. Bueno, leí varias cosas que escribió una persona que conozco, y la verdad quedé... no sé, un poco... no encuentro la palabra. Pero sí tuvo un gran efecto en mí, y la verdad me dio un poco de pena, aunque me pasaron varias cosas raras al mismo tiempo. Eran palabras tan... tristes, tan desesperadas. La verdad se supone que debía "no entender mucho" pero sí que entendí bastante. Es decir, hay muchas sensaciones que parece que hablaran desde mi teclado, pero no fui yo. Sí, creo que quizá estoy dando demasiadas "pistas", pero qué va. Es verdad, entendí, sea lo que sea y aunque no entienda el porqué, entiendo el cómo, y con eso basta.
No sé qué hacer con eso, y estoy pensando si es algo malo que... no haga nada. Al fin y al cabo... ¿qué tanto se podría retribuir? Sé que suena interesado, pero a lo que me refiero es que a pesar de todo me da un poco de pena pensar que yo noto todo lo que pasa en esa persona, pero que esa persona no siempre lo nota en mí. ¿Es algo malo decir eso?, ¿es que de verdad se puede ser "una mala persona"?... la única verdad que conozco ahora, es que voy a seguir mis propios instintos, porque siguiendo otras cosas, la verdad... me ha ido bastante mal.

17 agosto 2009

Sinceramente NO MAS

Sinceramente y desde el fondo de mi corazón no quiero más. No quiero más estudios (o resfrios que me atrasen en estos... igual, estrés acumulado) ni más trabajos. No quiero más frías mañanas con veinticuatro personas uniformadas, ni más profesores por un buen tiempo. Sé que esto lo dicen todos los estudiantes del mundo alguna vez (y muchísimos, más de "alguna" vez) dicen esto, pero yo lo siento en el fondo de mi alma, corazón, tripa, entraña... lo que sea.
Estoy simplemente y sinceramente TAN aburrida de todo esto, sólo quiero verano, ropa ligera, sol y brisas agradables. Y yo no soy una gran amante del verano, que conste. Mi estación favorita del año siempre ha sido el otoño, aunque claro que lo descubrí no hace tanto tiempo atrás. Pero de todos modos... NO QUIERO MAS. De verdad. Si lo digo es por que realmente ya lo he meditado mucho, y yo no digo (o escribo) las cosas sin sentirlas de verdad, o haberlas meditado durante mucho tiempo.
Ahora lo único que quiero es un poco de calma... un poco de tranquilidad sin mucho alboroto ni gente alrededor. Sólo unas pocas, o quizá sólo una...
¿Es acaso que no puedo con todo? No. Yo sé que puedo, pero simplemente creo que ahora quisiera abandonar, como si en realidad no pudiera con todo esto...
¿Es que no puedo ser inmadura e irresponsable alguna vez? De poder puedo. Pero al mismo tiempo no. Por eso quiero verano, por eso quiero San Juan... estoy aburrida de todo, y el todo a veces parece bien NADA.
Nada... curiosa palabra en mi vida. "¿Qué has hecho?" "NADA", "¿Qué pasa?" "NADA"... es que ya es la rutina estar en medio de una sigilosa nada.
Por eso es que quiero algo, por eso es que quiere UN NUEVO nada.
Quiero luces y sonidos nuevos cada día, y sorpresas agradables y más bien tranquilas. Estar relajada, estar FELIZ. Quiero poder disfrutar mi etapa favorita de cada día, esas horas que nunca aprovecho y disfruto. La noche. Sí, soy un murciélago por naturaleza aunque nadie pueda o lo quiera creer. Amo la Luna, las estrellas y toda esa vida Estadounidense nocturna que viven las personas "tranquilas" e "intelectuales" en las películas. Sí, adoro y envidio a veces como estas protagonistas ingenuas e introvertidas, se escapan de su vida tranquila pero poco excitante, acompañadas casi siempre de un divertido, sensible, y atractivo co-protagonista. ¡Es que ellas a pesar de todo, de su personalidad, de su vida, su trabajo, no le piden permiso a nadie! ¡Yo quiero eso! Pero... como diría cierto personaje... la vida es así, ¿no?

16 agosto 2009

Before&After

Quería no quererlo, y quería ser la princesa de él, quería a uno y no al otro e intentaba convencerme de un dolor real. Quería creerle a uno. Quería una historia rompecorazones, y quería un final agridulce, pero quería instantes bellos. Quería que no todo fuera hermoso, pero que fuera real al lado de uno. Eso quería.
Ya no quiero nada de eso.
Quiero la verdad, y esa es saber que uno fue un engaño. Quiero gritar y dejar de negar al otro, quiero gritar a los cuatro vientos que lo quiero, y que él a veces baja su guardia y demuestra lo mismo. Quiero sol y verano, historias largas y bellas, con momentos intensos, pequeños y rídiculos, pero sin príncipes ni princesas, sólo con uno y claramente sin el otro. Quiero colores y que las ropas los tengan, quiero ese lugar... por más que cinco días. En definitiva, lo que quiero es que esos momentos duren más, en definitiva, quiero que me quieras cada día un poco más... no quiero ser princesa, sólo quiera ser su chica normal.

What.......?

Estoy tan tan inestable... El estrés se apoderó de mi ayer en la tarde y era insoportable, pensé que iba a estar latente e insistente por mucho, y que no lo iba a poder sacar así como así, pero leer un rato y tomar algo caliente apasiguaron un poco el maldito sentimiento... Pensar me hacía muy mal, y creo que esas cosas hicieron que dejara de cranear aún más estrés. Pero hoy, la inestabilidad se hizo presente. A ratos estrés, a ratos tristeza, a ratos enojo, a ratos decepción... no sé, ahora escribo porque esta debía ser mi salida a todo lo que me pasa, a pesar de que esté escribiendo de lo mismo. No tiene mucho sentido... pero al fin y al cabo lo que me pasa tampoco.
Hace bastante tiempo ya, soñar me estaba haciendo mal, mucho mal. Destrúia más de lo que podía crear, y simplemente dejaba dolor o vacío dentro de mí.
Pero ahora estoy viendo que soñar a veces sí me hace bien. A pesar de que nunca deje de fantasear sabiendo que no me hace nada grandioso, ahora ví que no era necesario soportar algún d"dolor" o "desilución" por los sueños, sino que descubrí (para mi asombro) que tal y como estoy me hace BIEN. Supongo que en estas ocaciones estoy excusada para no pensar, y soñar un poquito más. Fantasear y cerrar los ojos al mundo por unos instantes antes de volver a empezar... y después de todo, cuando vine de la otra pieza al computador para escribir me encontré una sorpresa. Un pedazito de sueño.

14 agosto 2009

DON'T. move...

El hambre. Le debía esos 2 meses simplemente al hambre. Ahora le parecía rídiculo, incluso a veces le daba risa.
Bueno, no era que por la comida hubiera empezado todo de la nada, sino que gracias a la comida se había precipitado antes de lo esperado.
Recordaba todo perfectamente. El día, el clima... tenía todo en su mente, guardado como el más grande tesoro que cualquier pirata hubiera querido poseer. Sí. Era SU tesoro del pirata, nadie lo tenía y nadie lo podía mirar... sólo ella, su corazón, y a veces él.

El día había empezado ya con una sorpresa. Era sabado, y a las tres de la tarde vería a sus amigos. Hace bastante tiempo que no los veía a todos, tenía muchas ganas de salir de su mundo habitual por una tarde y escaparse a las usuales risas que rodeaban a esas personas; que no siempre veía, pero que siempre recordaba.
Como era habitual los fines de semana se levantó tarde luego de dormir cuantiosas horas. Tomó algo de jugo que había quedado del día anterior en la cocina y comió dos galletas de avena para matar el hambre. No almorzó ya que, a pesar de que se vería con sus amigos a las tres, iban a ir todos a comer algo de chatarra. Se vistió con tiempo y se arregló, aunque como siempre el tiempo se le hizo poco y las tres ya casi llegaban cuando salió de su casa.
Llegó un poco tarde, pero nada grave. De todas formas no fue la última en llegar, aunque claro que eso no lo sabía.
Saludó a todos y mientras reía con los comentarios que hacían alución a su "costumbre de llegar tarde" se sentó al lado de Camila.


-¡Miren quién llega! Mariana... te ganaron, lo siento.
-¡Eh! No soy la única que llega tarde, ¿ven? Además lo mío no fue tanto...-respondió la aludida mientras giraba para ver quien era el retrasado...
-¡Andrés!- saludó Tamara alegremente.

Allí había llegado otra sorpresa en su día. Andrés.
Le sorprendía verlo, ya que nunca se aparecía en esas juntas y ya estaba acostumbrada a no esperarlo para dichas ocaciones.
Y en realidad, ya estaba acostumbrada a no esperar nada, ni a nadie...


_____________________________________________________________

Bueno, aquí otras de esas cosas que no termino de una vez... Sí, habitual. Pero lo quería subir hoy, no sé, siento que me gusta como está redactado así que lo continúo después ya no puedo seguir. ¡Ah! Una cosa: no voy a hacer más entradas con continuaciones, voy a editar esta misma, así que si algún ser viviente está leyendo esto, y quiere seguir con Don't Move va a tener que fijarse en la actualización de ESTA entrada. Sería, bye...

08 agosto 2009

Start from zero!

¿Back to poetry? I supose so.

Sí, "ya que insistes". Nada más, no quiero explicar nada. Simplemente agregar que la exigua "poesía" anterior, no sé... no sé si me gusta o no, esto me las gana. ¿Te demuestro que no tienes razón?, ¿o en el intento te doy pasada a lo contrario?... en fin, sólo yo sé, sólo yo puedo. Para que veas. Extínguete acá.

Ya que insistes.

"Perdiste tu ser",
y acabada me las veía

gustosa la calma
pero las palabras reían

y gozaba el ser
con el mal, la miseria
probablemente cada una,
cada una de las penurias
y cada duda mínima extenuaba
como jugando a Dios,

jugando a semejar al temerario
jugando en canas,
creyendo en almas invisibles
y matando las existentes

sin ver, sin oír,
sin mirar ni hablar

sólo jugando
y mas que jugando fingía

fingía su poder
fingía su verdad
fingía confidencia
y fingía sin placer,

sin buscar no encontraba
y sin reír no callaba

"Cree y encontrarás"
y callada maldecía.

07 agosto 2009

Even a stupid frog

Maldita duda. No es por tí, es por la rabia. Ahora no eres el problema, y por cierta parte soy feliz de que no sea mi culpa. Es SU culpa y me está sacando de quicio. ¿Cómo alguien puede ser tan descarado? Cómo es que alguien puede pasarse dos años engañando a alguien. Diciéndole que la quiere, que lo hace desde el primer momento... y ahora que lo pienso, todo suena a un pobre cliché. ¿Cómo no me di cuenta antes? En qué estaba pensando. Tratando de suplir una emoción, por no quedarme sola, pegándome a un capricho sin fundamento. Qué principe qué nada. Hasta los sapos son mas honestos y leales que tú. Esto peor que la primera vez... y lo peor es que nunca lo sabes, y probablemente, nunca lo vas a saber. Porque me quedo callada para no hacer de la loca, para no hacer de la celosa y controladora que sé que no soy... pero, ¿cómo llegaste a tanta desfachatés? Es increíble, cómo el mundo alberga tantas cabezas sin una neurona que diga que algo está mal, con un mililitro de sangre en las venas que parezca más espesa de lo normal... hasta una estúpido sapo tiene más conciencia que tú. Todavía estoy impresionada... ¡cómo es que pude caer siquiera un segundo! Con tus palabras baratas, y tus fingimientos sin escrúpulos... ¿tan tarada se vuelve la gente al querer amor?, ¿es que así estaba yo?... Y yo que me sentía mal por dudar, por caer una y otra y otra vez en el mismo precipicio. Ahora veo todo. Tal y como dije antes: al fin y al cabo la duda siempre llega por algo. Por todo esto me atacaba tan fuerte y tantas veces el maldito insecto.
Quizá cuantas veces pasó sin que yo lo notara... y lo peor es que ahora lo veo sólo porque ¡ella es una de mis mejores amigas! ¿Cómo te atreviste? Engañarme a mí así, de esta forma tan vaga, y pensar que no lo iba a ver... ¿es que no sabes que nos conocemos?, ¿es que no sabes que somos amigas?, ¿no sabes que es de MIS MEJORES amigas? Ya sé que la distancia se acentúa, y que cada día que pasa me pierdo de algo... pero, aún así seguimos unidas...¿no? Al menos la sigo contando entre mis manos, como una amiga. Y tú atacaste por ese lado... ¿es que lo haces a propósito?, ¿o en serio me estás "engañando"?

Hasta un estúpido sapo tiene más de príncipe que tú...

06 agosto 2009

Between blue-prince & frog

Estuve todo un día peor que distraída. Todos me preguntaban qué me pasaba, y ni yo sabía bien. Por esas casualidades también alguien me preguntó si era feliz. ¿Lo era? ¡claro! y sin pensarlo un segundo hice notar a mi interlocutor que mucho. "¿Por qué tan feliz?" preguntó esta vez, y simplemente respondí "no sé", tratando de hacer obvio que sí lo sabía, pero no funcionó. Descepción, pero de todos modos no iba a decirle nada concreto. Ni siquiera mis mejores amigos sabían. Nadie sabía. Sólo yo, sólo nosotros. Era mi pequeño gran secreto, algo que sentía que me pertenecía sólo a mí y que nadie más podía poseer, pero... si es así, ¿por qué ya no soy "tan" feliz?, ¿por qué siquiera me siento bien? Es esa odiosa sensación de caer en la duda... me gustaría decir que no fue culpa de ver una foto, una simple imagen que debería haber tenido presente en mi memoria, pero no sé si podría, porque quizá sería mentira. Ahora releo las simples palabras que me volaron la cabeza y redefinieron absolutamente para mí el término de las "mariposas en el estómago", y ya no es instinto en mí sonreír. ¿Qué está pasando? ¿La duda ataca otra vez?, espero que no , son esas las cosas que hago por las que hay días que me odio...

02 agosto 2009

Así NO debe ser la vida...

"Así es la vida" me dijo. No supe que contestar, me dolía el pecho y estaba apunto de llorar. ¿Por qué la vida era tan cruel? La vida no debía ser así, tan mala, tan amargada...¿o es que sólo me pasaba a mí? ¿he sido una mala persona o es sólo que el mundo no me quiere ver feliz? ¿es por qué no sé si creo en Dios? ¡¿POR QUE?! No es justo sufrir así otra vez. Cambié, intenté, y todo salió mal... si me quieres porque me haces esto...
Estoy aburrida de sentir esta presión en el corazón, ese hueco, tan ancho y hondo que duele cuando está, y que hace un vacío cuando comienza a sanar... Estoy tan desesperanzada, tan... confundida. No sé qué hacer. Quiero saber qué te pasa antes de poder tomar una desición. Quiero saber qué sientes, qué sientes POR MI. Me lo has insinuado tantas veces... y yo he caído y vuelto caer en dudas y preguntas, pero ahora que pormetí no hacerlo más la distancia vence. La distancia que parece ser el causante de nuestros problemas, la distancia, cruel y desalmada, que no me permite ver claro. Ahora la claridad está en que te quiero...´pero en nada más... Cambiaría mil siglos por volverte a ver y hablar, cambiaría mil alegrías sólo por poder mirarte a los ojos una vez más. No me digas estas cosas... estas que me hacen llorar.
Estoy cansada por recién comenzar a luchar... cuánto que quería ser yo la que pudiera decirte "yo fuí esa mujer que te conquistó"... pero a pesar de que dices quererme, ¿no lo quieres intentar? Estás destrozándome quizá sin saberlo. No hay nada del todo cierto... por lo menos no desaparezcas una vez más.
Miro tu nombre, plantado en el monitor, gritándome; gritándome tantas cosas que no quiero escuchar... pero lo supiste resumir bien, le echaste la culpa a la vida y me dejaste acá. Miro tu nombre una vez más, plantado en mi cabeza, suplicándome; suplicándome que te entienda de una vez... pero supiste callarte, dijiste que me querías, que no lo podías evitar, pero que quizá no nos veríamos otra vez. Miro tu nombre una vez más, otra más. Miro, y está grabado en mi corazón, amenazándome con quedarse, amenazándome con herirme cada día la triste vida que me quiere ver sufrir.
¿Es por el arte? ¿es la inspiración acaso? ¿por eso me quieres ver sufrir? Dejaría mil paraísos de palabras por ser feliz un día con él. Tan solo un día, tan solo un abrazo y una carica... solamente un roce a tus labios y sería feliz. Por tí dejaría mil famas y cien reconocimientos, dejaría cada paleta de pintura, y cada canción sólo por tenerte conmigo. (...) Pero ya entendí que no puedo. Estoy condenada a escribir mil versos sufriendo, a pintar los besos que nunca tendré, y a esuchar tus miradas por la radio...

Supongo que es verdad, la vida es así.

01 agosto 2009

Last memory

Maldito cerebro que tengo. Luego de no escribir mucho tiempo "2 palabras" estoy viendo que no puedo seguirla. Hoy luego de casi reventar a golpes al querido Veneno abrí el documento de la historia, y escribí casi una página, luego no puede seguir porque...¡no recuerdo que me pasó despues del día cero! Ese es el problema con las historias propias, si no te acuerdas de algo moriste. Yo por mi parte creo que tendré hacer un racconto con todo lo anterior... pero no sé, hay algo que me incomoda al escribirlo, no sólo por el hecho de estar reviviendo esas épocas... sino porque lo cuento en primera persona, y es cómo si volviera a sentirlo todo otra vez. No me duele, no me importa, y sin embargo hay algo... aunque si hay algo ¿por qué no recuerdo nada nítidamente después de aquel día? No es que haya quedado como un zombie, porque si fuera así de todas formar recordaría mi estado "zombístico"... Bueno, todavía tengo que arreglar el primer capítulo de esta maldita historia, pero por lo demás está listo. ahora voy a empezar el segundo, y creo que me voy a hacer una cuenta en FictionPress, ahí subiré todo algún día... pero hasta entonces subo lo que llevo aquí. Ojalá no lo detesten.
_____________________________________________________________
Capítulo 1: El Día Cero
Era extraño pensar como había llegado hasta ahí, ese era el punto de quiebre, mi corazón no podía más y no sabía como había aguantado tanto. Bastaron solo dos palabras para destrozarme. Mi alma se desgarraba, y ni siquiera podía llorar.
En silencio miraba el monitor del ordenador de mi hermano. No lo podía creer. Eran tantas sensaciones mezcladas… solo sabía que nunca me había sentido así, y que nunca más quería sentirme así.
De repente él se fue, después de no contestar mis dolidas frases. Yo sabía que en realidad seguía ahí, solo que para variar, me estaba evitando. No escribí nada más y me quedé pegada mirando esas pocas palabras escritas en rojo. “Pero si nosotros somos solamente amigos”. Solo amigos…Como me dolía y me enojaba, decirme eso, ¿después de todo lo demás? Simplemente era un descaro. Súbitamente mi silencio fue interrumpido por mi hermano:
-¿Ayúdame a pelar estas manzanas?-gritó desde la cocina. Respiré profundamente y hablé:
-Bueno. Espera un poco- mi voz temblaba a pesar de que casi no se oía. Cerré los ojos fuertemente tratando de serenarme. Luego de un rato me paré y fui hasta la cocina. Mis piernas actuaban solas, casi como zombis, aunque al igual que todo mi cuerpo, temblaba como gelatina. Agarré un cuchillo y tomé una manzana especialmente pequeña.
-¿No lo puedes hacer solo? Yo no sé pelar manzanas-dije disimulando
-Yo tampoco sé, por algo te pedí ayuda.
No volví a hablar durante al menos uno o dos minutos. Cuando apenas había logrado sacar dos centímetros de cáscara en la manzana, volví a hablar:
-¿Me esperas un poco? Tengo que llamar a alguien. Solo dos segunditos.
Salí prácticamente corriendo (en la medida que mis piernas lo permitían), agarré el teléfono inalámbrico y marqué el único número que desde hace un tiempo marcaba…
-¿Aló?
-Hola soy yo.
-Ah, hola, ¿como estás?
-Mm… mal.
-¿Qué pasó?
Comencé a contarle todo lo que había pasado. Cómo le había dicho lo que ella misma me había sugerido, lo que él había contestado… cómo me sentía.
-Vale me duele el corazón. Literalmente. Me duele, mucho… ¡nunca me había sentido tan mal! Y ni siquiera puedo llorar, no me sale una mísera lágrima.
-Pero… no, no… ¿Qué estás haciendo?
-¿Qué? Nada. Bueno…estaba ayudando a mi hermano a pelar unas manzanas. ¿Por qué?
-¿A Franco?
-Sí.
-Habla con él
-¿Qué? No, no puedo. Vale no puedo. No me va a salir ni siquiera un ruido de la boca. No puedo, de verdad que no.
-Pero trata. Te va a hacer bien…
Así dos segunditos se transformaron en veinte minutos. Veinte minutos hablando de un desalmado, veinte minutos diciendo “no puedo”.
Una cosa era haber hablado con Franco antes, pero otra muy distinta era hacerlo ahora. ¿Qué le iba a decir? “Franco adivina qué: tenías razón, es un idiota, lo odio y me rompió el corazón”… no creo que eso funcionara.
Todo era tan dramático, lo odiaba. Odiaba esa situación y lo odiaba a él…
-Por favor, solo trata. Después me cuentas que tal.
-Bueno-respondí susurrando-colgué el teléfono y tragué. Tenía un nudo enorme en la garganta.
Consideré seriamente mentir, y no contarle nada a Franco. Luego llamar de vuelta e inventar una conversación con mi hermano, pero simplemente yo no era así, y tampoco podía mentirle a una de mis mejores amigas…
-Menos mal que eran dos segunditos.
-Perdón-dije fingiendo una sonrisota. Miré la cocina y me di cuenta de que ya no habían manzanas, excepto una muy pequeña a medio pelar-¿Ya las pelaste todas?
-Sí. Solo falta la que estoy haciendo ahora y la tuya.
-Oh…
Se sentía como el silencio acuchillaba al aire y como el aire se desgarraba de repente. Miré hacia el techo y descubrí que la cocina era sorprendentemente luminosa en esos instantes, me dolían los ojos con tanto brillo. Volví los ojos a la labor e inspiré una bocanada de ese aire rasgado.
-Tenías razón-dije después de un buen rato. Franco me miró extrañado sin comprender nada.
-Razón… ¿en qué?
-En… lo que me dijiste. Sobre Seba-eché una miradita a Franco y rápidamente la llevé hacia mi pequeña manzana oxidada.
-¿Cuál de todas? Te dije varias cosas…
-Lo que dijiste sobre… lo que pensabas de…-dejé la manzana sobre la mesa y comenzé a mover las manos adelante y atrás tratando de expresar el concepto “nosotros”
-Ah… ya sé a que te refieres…Bueno, era lo que pensaba, por lo que él me había dicho, pero no estaba seguro. Osea...podría haber sido mentira.
-Pero no lo era-susurré.
Estaba claro que no estaba entendiendo a qué me refería. Y yo no daba más para hacerle entender.
-Listo-dije rompiendo el silencio. Franco me miró y le mostré la manzana desastrosamente pelada.
-Ahí está la olla, échala-dijo señalando a su derecha con la cabeza.

Aferraba cansinamente la almohada, con los ojos abiertos pero sin ver nada. Todo estaba oscuro en mi pieza y la única luz que había se encontraba a mis espaldas. Un dolor horrible aprisionaba mi corazón, pero aún así seguía sin llorar.
-Por qué…-decía en un susurro a la muralla- por qué…
Cerré los ojos fuertemente, cómo tratando de borrar las últimas 24 horas, pero al abrirlos nuevamente volvía a encontrar el silencio de la noche, no una mañana clara, que parecía tan inocente ante mis ojos, sólo había negro, y nada más.
Luego de una hora aproximadamente me quedé dormida. Con los ojos cansados y con una puntada en el pecho. Estaba exhausta, pero el dolor le ganaba a todo lo demás.

Desperté con la garganta seca, y con la espalda dolorida. Era de mañana, y respiraba aún más fuerte que en la noche anterior. La noche anterior, qué ajeno sonaba eso, me había ido a acostar muy temprano, pero… ¿qué hora era? No lo quería saber realmente, ningún pensamiento era relevante. Sólo veía la luz reflejada en las paredes, y eso me bastaba. Era de día. Un nuevo y horrible día.
_____________________________________________________________
Bueno, eso es todo! Ojala les haya gustado... aunque sea un poco.